Santiago de Santiago no para. Con decenas de esculturas repartidas por todo el mundo, continúa con la agenda repleta de trabajos y con la mirada siempre puesta en el futuro
Autodidacta, se ha dedicado al arte toda su vida. En sus obras plasma su relación con la vida, sus experiencias y su filosofía. Santiago de Santiago (Navaescurial, Ávila, 1925) es un escultor, poeta y profesor incansable que no para de crear, transmitir sus ideas y mirar hacia delante. Sus pensamientos siempre se centran en avanzar y en el futuro: “Entrenamiento. Mirar adelante sin ver el fin. La vida es seguir. ¡Son tan ricos los ‘alimentos’ que promete ese camino!”, comenta cuando se le pregunta sobre la evolución de su obra desde el inicio a la actualidad. Y es que no se detiene ni un solo segundo.
Con estudios en Japón, Francia e Italia y con exposiciones individuales en muchos más países, Santiago de Santiago no solo ha evolucionado por sus continuos viajes. Sus experiencias y su personalidad siempre plasman su obra: “Hablar de lo que siente. Se ve, se aprende, se crece, se suman vibraciones que templan el alma”, explica. Con decenas y decenas de obras a sus espaldas, no se atreve a subrayar ninguna como favorita, aunque destaca todas las realizadas a la Familia Real española (desde S.A.R. el conde de Barcelona a la infanta Leonor).
¿De qué obra se siente más orgulloso?, preguntamos. “De esta. De seguir. Se aprende, se avanza y solo se ve donde está lo no vivido, que te atrae y te enseña a decir ‘más’”, contesta siempre con la mirada puesta en el horizonte y con palabras cercanas a la filosofía y a la poesía. Santiago de Santiago es tan incansable que creó La Orden del Torsón de Santiago con el objetivo de premiar a quienes realizan una importante actividad en beneficio de la humanidad. Como reconocimiento, el ‘Torsón de Santiago’, nombre dado a partir de la filosofía de Platón acerca de las tres almas. “El Torsón de gran torso- es el recinto de la segunda alma de Platón”, explica De Santiago.
Además de implicarse con la entrega de su reconocimiento a diferentes personajes de la cultura, la política o la empresa, sigue con una agenda repleta de trabajos e imparte clases de escultura para todos los niveles en su estudio. Es un apasionado de su trabajo a tiempo completo. Y con ganas de seguir creciendo y difundir su obra y pensamientos: “Que esperen a mi libro. Llegará mi libro”, sentencia.
