De origen ecuatoriano, se puso de moda durante la construcción del canal de Panamá
¿Quién no conoce el clásico sombrero que todas las cabezas lucen cuando llega el buen tiempo? Lleva el nombre de panameño pero no lo es. Todo el mundo lo conoce como tal pero, más allá de su denominación adquirida, el famoso sombrero fue creado y se fabrica en el vecino Ecuador bajo la denominación de “sombrero de paja toquilla”.
Existen diferentes teorías sobre su notorio nombre aunque la que mayor fuerza tiene es que estos sombreros alcanzaron popularidad durante la construcción del Canal de Panamá, cuando miles de sombreros fueron llevados desde Ecuador para que los trabajadores en la complicada obra se protegiesen del sol. Se dice que la verdadera fama llegó cuando Theodore Roosevelt visitó el canal y usó uno de ellos.
Fuese cual fuese el origen del nombre, la realidad es que el verdadero panameño destaca por su calidad y elaboración. Está hecho a base de hojas de palmera cuyas fibras pasan por un proceso de cocción, secado, lavado, blanqueado, horneado y planchado que puede durar hasta casi un año. Los precios oscilan los 100 y los 5000 euros, según características finales y calidad.
El sombrero panameño fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2012.