La banda presentó su nuevo disco “Mismo Sitio, Distinto Lugar” en el festival Marenostrum Music Castle Park en el Casillo Sohail de Fuengirola en una noche mágica
Fueron energía, que en simbiosis con los casi 8.000 asistentes al concierto, se adentrarón en un disco de refundación de Vetusta Morla, como ellos mismo han definido.
La presentación de «Mismo Sitio, Distinto Lugar» en Fuegirola fue energía pura. Un viaje al epicentro de la banda para asistir en primera persona a una “reafirmación de su esencia, cimentada, irónicamente, en una agitada metamorfosis” – como relatan en su propia página oficial–. Y en ese corazón de sentimientos emanaba una fuerza que conecta con el público. “Vuestra energía y magia se han extendido desde el Castillo de Sohail hasta el mar”, escribían en sus redes sociales la banda después del concierto.
La metamorfosis en directo comenzó con el single del nuevo álbum y siguió con “Deséame suerte” y “El discurso del rey” y con el público entregado, tiró la banda de “La vieja escuela” para cuidar un vals en vena que llegaba con el “23 de junio” temerosos de que San Juan no los queme en su hoguera. Con “Al respirar” una legión de seguidores comenzaron a granjear unidos, como si no existiera la materia y con “La deriva” se produjo una explosión de recuerdos para encerrar el ruido en una muralla mozárabe que no era de cartón.
La invitación a la rebelión vino con temas de clásicos como “Golpe maestro”, “Maldita dulzura” y “Copenhague”. En ese punto la banda brindó al público “Sálvese quien pueda”, que invitaba a ser “Valiente”. “Te lo digo a ti” era la clausura de esta “Fiesta Mayor” que no acabó. Faltaba por escuchar en “Consejo de sabios”, “Hombre del saco” y “Esos días raros” provocando que la materia se desvaneciera entre ondas musicales, en una explanada histórica a los pies de un castillo donde la energía fluía entre el mar y el pasado.
