Si se quiere huir de la rutina y disfrutar de uno días de sol y playa pero no quiere renunciar a las costumbres típicas de la Semana Santa española, Gran Canaria es uno de los destinos más recomendables.
Durante el día, sus largas playas de arena dorada son el lugar ideal para descansar o practicar deportes náuticos. Al caer la tarde, la ciudad de Las Palmas -donde se concentran los actos de Pascua- enmudece bajo el olor a incienso de sus calles.
El viernes Santo es el día que más procesiones se concentrarán en la capital grancanaria. Los turistas podrán conocer las tradiciones locales y participar de ellas. Una de las más llamativas es la “Procesión de las Mantillas” porque las señoras que participan en ella visten con mantilla para acompañar las santas imágenes.
La misma procesión también se conoce como la “Procesión del Arte” por salir en ella las imágenes del Santísimo Cristo de la Sala Capitular y de Nuestra Señora de los Dolores, las dos obras más importantes del máximo exponente de la escultura en Canarias, el escultor José Miguel Luján Pérez.
Las mantillas y el arte acompañan la fe y devoción de los feligreses el viernes Santo en la capital gran canaria, una tradición cultural digna de admirar.