Sudáfrica es un país de impresionantes paisajes, verdes extensiones de terreno que se alternan con cadenas montañosas, vivos colores y hermosas playas. Además, los cielos abiertos y el buen tiempo durante todo el año permiten a los visitantes vivir emocionantes aventuras que abrirán sus mentes y corazones a la belleza de Sudáfrica. Entre ellas se encuentran tres actividades diferentes para contemplar este bello país desde las alturas: parapente, globo aerostático y paracaídas.
Parapente desde la cima de las montañas
En Sudáfrica algunas de las mejores vistas se encuentran en la cima de las montañas. Los visitantes que buscan una experiencia emocionante y disfrutar de las mejores panorámicas del país no pueden perderse la experiencia en parapente. La región de Western Cape cuenta con más de 60 sitios desde donde despegar con la fuerza del viento. Una de las actividades más buscadas en la región comienza en Lion’s Head, en Ciudad del Cabo. La hermosa “Ciudad Madre” se extiende bajo sus pies, el azul del océano y el verde del Parque Nacional Table Mountain ofrecen un telón de fondo inolvidable.
Desde el aire en un globo aerostático
Aquellos que quieran disfrutar de un momento de paz en el aire tienen la opción de recorrer los cielos de Sudáfrica en globo aerostático. Existen numerosas propuestas que permiten disfrutar de variedad de paisajes por todo el país. Por ejemplo, en Free State es posible sobrevolar el cráter de Vredfort, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es el impacto más grande de un meteorito en la Tierra y tiene 300 km de diámetro. Data de hace aproximadamente 2.000 millones de años y es el segundo cráter conocido más antiguo del planeta. En la misma región, la ciudad de Clarens, flanqueada por las montañas Maluti, ofrece unas vistas espectaculares. La ciudad es apodada la «Joya del Estado Libre del Este», y debe su nombre a la ciudad suiza donde Paul Kruger pasó sus últimos días. En la región del Cabo Norte, el desierto del Kalahari es una experiencia única con paisajes de vivos colores gracias al contraste entre las dunas de arena roja y el cielo azul.
Otros lugares que observar desde el cielo y sobrevolar son las interminables llanuras de Mpumalanga, las grandes montañas de Drakensberg, los huertos subtropicales y el río Sabi, las reservas privadas de Limpopo junto al Parque Nacional Kruger o los numerosos viñedos en Western Cape, entre otros.
Emociones en paracaídas
Para los más atrevidos, nada mejor que atravesar las nubes a 190 km/h y experimentar una fuerte dosis de adrenalina. Esta aventura se puede practicar en la mayoría de las regiones de Sudáfrica, con la posibilidad de realizar paracaidismo en dúo (tándem), solo o con un instructor. Además, los expertos pueden reservar una experiencia privada a 3.600 metros de altura y garantizar un mayor tiempo de vuelo.